lunes, 25 de junio de 2007

La quedada sevillana

Pues al final, nada más que vinimos Elara y yo a la quedada. Algunas personas más quisieron unirse a nosotras, pero por unos motivos o por otros, no pudieron. Pero seguro que en próximas quedadas (que va a haber más, seguro) esperamos crecer.
El sitio me gustó mucho, estuvo muy tranquilo, casi toda la tarde vacío y con aire acondicionado, la verdad es que se estaba muy bien allí. Tenían varios tipos de té, lo cual para mí es estupendo, porque yo no tomo café, y me gustan los tés de calidad.
Estuvimos cotorreando, y ella me enseñó algunos libros que ha traído de Londres, y luego estuve enseñando a Elara a manejarse con las agujas de dos puntas, al principio cuesta un poco, y después de un rato, ya le iba cogiendo el punto al tema (nunca mejor dicho).
Bueno, espero que en la próxima quedada elijamos un día que le venga mejor a más gente.

1 comentario:

Muir dijo...

Parece que lo pasásteis bien, ¿verdad? ¡Seguro que a la próxima irá más gente!